Después de llegar casi hasta el final de LAK12, abandonar HCI (Coursera) tras apenas empezarlo, llegar hasta la mitad de ST101 (Udacity), el primer MOOC que he terminado de verdad ha sido el curso de iniciación a la analítica digital de Google.
¿Cuáles son los motivos por los que he terminado este curso y no los otros?
- Era un curso mucho más corto. Consistió en 140 minutos de vídeo (distribuidos en 22 vídeos de diferentes duraciones). Si uno se limita a ver los vídeos, leer una parte de los recursos complementarios –posts en el blog de analítica de Google, artículos de la web de Ayuda de Google Analytics–, y responder los cuestionarios de cada unidad, efectivamente, puede hacer el curso con la dedicación de 4-6 horas que comentan en la FAQ del mismo. Aunque se dedique el doble o el triple de tiempo, no deja de ser una décima parte o menos de los cursos de Coursera o Udacity, que por lo general duran 10 semanas y requieren una dedicación de 15-20 horas a la semana. De forma que para terminar este curso, no hizo falta una reorganización considerable de mi semana durante casi un trimestre, mientras que en el caso de los cursos más largos sí es necesario.
- Era un curso más relevante. Este curso viene tras varios rediseños, tanto de funcionalidad como de interfaz, de Google Analytics. Es decir, era un curso que muchos de los que trabajamos con la herramienta a nivel diario, necesitábamos para seguir usándola sin fricción. La relevancia para las tareas concretas del día a día es el factor número uno del éxito de los cursos de formación continua en la empresa.
Comentaba el otro día que los cursos de formación eran cosa del pasado. Efectivamente, solo con este cursillo de Google nadie va a aprender analítica digital. Lo que sí va a tener son algunas pautas para enfocar los planes de medición y una buena base para usar una herramientas concreta: Google Analytics. El curso ayuda a aprender aquellas partes del trabajo del analista que son estandarizadas. La parte customizada hay que aprenderlo trabajando sobre el terreno.
El curso es, por cierto, también un progreso si lo comparamos con los recursos de antes, pues está actualizado y mejor empaquetado. Un MOOC de empresa que es de libro: ayuda a aprender proporcionando una experiencia positiva en relación con el producto y la marca.