Es maravilloso escuchar a Monty Widenius hablar de su empresa, MariaDB, porque lo hace con amor, y no sólo porque lleva el nombre de su hija pequeña. No tiene oficina. No con el fin de ahorrar costes sino porque los 20 trabajadores, que parece que son al mismo tiempo accionistas de la empresa, viven en diversos lugares del mundo. De hecho, el coste de los encuentros presenciales de varias semanas de duración que organizan cada año en distintas ciudades, equivale a mantener una oficina de 20 trabajadores.
5 comentarios en «La empresa virtual según Monty Widenius»
Los comentarios están cerrados.
Se trata de optimizar el talento: al renunciar a tener una oficina no persigues ahorrarte la pasta, sino optimizar el talento. Te da igual que el buen programador viva en Bulgaria, en Finlandia o en Lisboa: lo quieres en tu proyecto. La manera de poder tener en tu proyecto a gente que vive en sitios diferentes y no pueden (o quieren) trasladarse es renunciar a tener una oficina, el paliativo (más que interesante, por otra parte) a esa pérdida de interacción es hacer encuentros semestrales en los que se desarrollen vínculos entre todas las personas involucradas en un proyecto, más necesarios aún cuando el proyecto es copropiedad de todos los trabajadores, el «hacker business model» que recordó el mismo Widenius.
Exacto. El trabajar juntos día a día desde la distancia crea la necesidad de un contacto más personal, presencial. El de MariaDB me resulta un bonito ejemplo de que Internet con su extensión global, permitiéndonos conectarnos libremente con quien queramos, nos ha devuelto paradójicamente la escala humana.