En índice Standard & Poor’s 500, menos del 30% de las empresas son familiares (una familia es propietaria de una parte significante de la empresa y puede así influir en las decisiones). En los mercados emergentes, el 60% de las empresas que facturan más de mil millones de dólares estadounidenses son empresas familiares.
Ventajas de invertir en empresas familiares
- Conocimiento profundo del entorno local, relaciones ya trabajadas con autoridades y reguladores locales.
- En entornos legalmente poco estables, la familia aporta confianza en el mercado.
- Si el gerente es propietario, se evita el problema principal-agente y es más fácil que la empresa se centre en el largo plazo.
- En cuanto a la salud organizacional, son igual o más saludables que las empresas no familiares.
Riesgos de asociarse a o invertir en empresas familiares
- Falta de transparencia en el modelo de propiedad que dificulta las innovaciones en el gobierno de la empresa.
- Es un reto que el horizonte de tiempo de la empresa y el de los inversores coincidan. Para la empresa familiar corto plazo son 5 años y medio plazo 20 años. Para muchos country managers de empresas multinacionales 5 años son todo el tiempo que sus empresas les dan para conseguir despegar en el país.
- Las empresas familiares tienden a diversificarse hasta el extremo: pueden aparecer como competidores, compradores o vendedores en nuevos mercados de forma imprevista.
- La sucesión. Menos del 30% de las empresas familiares siguen siendo familiares hasta la tercera generación.
- Los reguladores locales pueden eliminar ventajas a empresas familiares para favorecer otros sectores de la economía.
Recomiendo leer todo el artículo en McKinsey&Company.