La inteligencia de negocio sirve para conocer mejor el propio negocio. ¿Qué objetivos resultan más fáciles de alcanzar? ¿Qué parte de nuestra actividad es más rentable? ¿Qué cambios en los productos y servicios están demandando nuestros clientes? ¿Sería rentable añadir más servicios posventa?