Hace unas semanas estuve viendo Path, una aplicación para móviles, optimizada para el mantenimiento de las relaciones más íntimas de las personas: pareja, familia, amigos íntimos. Si Facebook no me gusta porque persigue mantener las personas y las relaciones dentro de sus muros (aparte de ser una aplicación privativa y centralizada y una empresa que trafica con datos personales), Path, que hace lo mismo pero con la meta de que te expongas aún más, en tu faceta más íntima, me echa mucho para atrás. Pero me ha resultado interesante descubrir en Error500, que en Path el número máximo de las personas con quienes compartes está limitado a 150, inspirado en el Número de Dunbar.
En Bazar, dónde pensábamos en las redes como grupos de empresas interesadas en crear un mercado preferente entre ellos y de cara a su exterior, también barajábamos el Número de Dunbar como el tamaño máximo de un grupo de empresas así.
150 parece ser el número aproximado de personas con las que podemos relacionarnos a base de responsabilidad y confianza. La escala humana. Más allá de este número, nos volvemos un poco hormigas hasta, en algún momento, sólo diferenciar entre Cero y Algunos, algo que nos acerca a argumentaciones como esta de la Reina de las hormigas: «No te preocupes por las hormigas bajo tus patas, no es posible que mates más de cero».