La inteligencia de mercado se refiere al conocimiento sobre el entorno económico y social que permite tomar mejores decisiones. Como «inteligencia de mercado» se suele denominar al conocimiento que se requiere para proyectos empresariales, mientras el conocimiento necesario para tomar decisiones relacionadas con el empleo y el trabajo se suele llamar «inteligencia de mercado laboral».
Igual que la inteligencia de los estados que nos cuentan las películas de James Bond, la inteligencia de mercado estaba, hasta la llegada de Internet, vinculada a grandes organizaciones (consultoras, administraciones públicas, organizaciones internacionales) que eran las únicas que disponían de los medios para acceder a fuentes de información y transformar ésta en conocimiento.
Hoy en día, sin embargo, Internet facilita que también las empresas medianas y pequeñas y las propias personas tengan acceso tanto a fuentes de información como a herramientas para convertir la información en conocimiento. Las personas y las empresas que aprovechan esta oportunidad desarrollando la habilidad de generar de forma continua el conocimiento que necesitan para tomar decisiones, sea para montar un negocio sea para buscar empleo, estarán en condiciones de tomar mejores decisiones y ganarse una vida mejor.
La información sobre el entorno macroeconómico que generan, por ejemplo, los diferentes observatorios, puede orientarnos hasta cierto punto. Pero es muchísimo más útil que todos tengamos nuestras propias fuentes, seleccionadas y continuamente revisadas por nosotros mismos en función de los objetivos específicos que tengamos en cada etapa de nuestra carrera profesional, convirtiéndonos en los diseñadores de nuestro propio conocimiento, en nuestro propio agente de inteligencia de mercado laboral.
Nuestras fuentes de inteligencia de mercado laboral deberían incluir, por tanto, información sobre el mercado a nivel macroeconómico y sectorial pero también información local específica así como empresas y personas concretas cuya experiencia es relevante para nosotros. Por ejemplo, si nos dedicamos (o queremos dedicarnos) a la producción y venta de alimentos «naturales» o ecológicos, leyendo noticias y estudios a nivel europeo podemos llegar a saber que Escocia un buen lugar para practicar y trabajar en este campo. Pero para identificar oportunidades y posibles interlocutores de cara a organizar prácticas o buscar empleo, necesitaremos leer estudios sobre el sector elaborados a nivel local así como seguir, de una forma prolongada en el tiempo, las publicaciones de las empresas y las personas que viven y trabajan en este sector en Escocia.