Prácticas de gestión de conocimiento de los aborígenes australianos

Portada de Treading lightly

En el feed de Jay Cross descubro esta perla de la historia de los aborígenes australianos, tomada del libro Treading lightly, de Karl-Erik Sveiby y Tex Skuthorpe.

At the age of around twelve a young man would, together with his contemporaries, embark on a long learning journey that would forever change him. It would take fourteen to sixteen years before he returned to his own country.

The young man understood some of the language of each community, because his early teaching was from the women who had married into his community. He could therefore show respect when he went into each different community. But he still had much to learn, including the fact that communication is more than words; people also show respect in the way they speak. To show respect he would, for instance, not look the members of one particular community in the face when he talk.

It was essential to know the whole of everything and he learned that the valuable knowledge is hidden with in and cannot be see-only with patience will it be revealed. Surface knowledge has only limited value.

When the man finally returned to his home community, he still had to perform three more ceremonies taking up to six months in total, before he was considered an adult man with the ability to take on his role for his community. And now he could finally marry.

The women were considered to mature into responsible adults at a much younger age. Hence the women did not need to travel widely to learn. The girls learned about the neighboring habits from the women in the community. Because the women married and went to live with men in other communities, knowledge from all the surrounding groups was brought into each community.

Itinerarios formativos de empresa

Hay muchos motivos que pueden llevar a la pyme a plantearse la creación de itinerarios formativos propios. La incorporación de personas nuevas y la formación continua de las personas ya a bordo pertenecen a los más importantes. Lo primero es, por supuesto, la intención de dedicar tiempo y esfuerzo al aprendizaje. Una vez que ésta existe, lo habitual es contratar cursos, bonificados o no, de proveedores de formación, externalizando la formación. Y ésta es una decisión que hoy en día cabe cuestionar pues el conocimiento se está convirtiendo en el activo más importante de las empresas y su gestión, mediante el aprendizaje, en una actividad core de cada vez más pymes. Y las actividades que son el core no se externalizan a la ligera.

Los itinerarios formativos propios de la pyme son el tema de mi reciente post en Con tu Negocio, el blog para pymes de Movistar. Con tres elementos claves: herramientas, contenidos e interacción. Planteo posibilidades como la no necesidad de un profesor como figura central y el tremendo valor del contexto real, dos posibles ventajas de los itinerarios propios de empresa frente a los cursos externos. Ello no quita que sean un gran reto para la empresa. Lo son. Pero son un reto con recompensas más que interesantes, como aumentar el atractivo de la empresa ante personas responsables y con talento, convertirse en referente en el sector y abrir los itinerarios ante clientes, proveedores y personas externas.

Minerva Project, a grandes rasgos

Minerva Project

Una de mis lecturas más interesantes de la semana fue el artículo de Ki Mae Heussner en GigaOM, comentando la noticia de que Minerva Project crea un non-profit para investigar modelos de negocio sostenibles de la educación universitaria del futuro.

Minerva Project en sí es una empresa tecnológica privada que descubrí en abril de 2012 cuado recibió capital semilla de 25 millones de dólares, bastante superior a la que las empresas tecnológicas educativas suelen recibir. El fundador y CEO de Minerva es Ben Nelson, anteriormente Presidente de Snapfish, un servicio online de alojamiento e impresión de fotos, adquirido por HP. Se le puede ver hablando de su nuevo proyecto en un evento TEDx en San Francisco.

En un movimiento a contracorriente de las tendencias actuales de desempaquetar la educación superior, Minerva Project propone un reempaquetamiento de la misma con nuevas reglas de juego. Su objetivo, una educación privada de élite para cultivar el pensamiento crítico y las «artes liberales» guarda, en mi opinión, una gran similitud con la posible universidad del futuro que dibuja el profesor Jorge Jiménez en El hacker contra la universidad zombi. La segunda parte del objetivo de Minerva es proveer esa educación superior de élite por menos de la mitad del precio actual. En abril se mencionó la cifra de 20.000 dólares estadounidenses al año.

Tras esa pequeña introducción, unos apuntes breves sobre los rasgos principales de Minerva Project, que era mi objetivo con este post.

  • Será una universidad online. Aunque en abril se habló de la movilidad geográfica de los estudiantes en el última año, lo que apunta a la necesidad de cierta infraestructura de campus.
  • Los alumnos y los profesores serán de todo el mundo. Aunque se nota que su mirada es desde el Norte, como veremos más abajo.
  • El idioma, por lo que se sabe hasta ahora, podemos suponer que será el inglés.
  • Reclutamiento de profesores que se encuentran en épocas de transición de su carrera.
  • Integración de la investigación y la educación, con los investigadores decidiendo con libertad sobre la propiedad intelectual de sus inventos.
  • Rechazo completo de las ayudas estatales a la educación por crear éstas incentivos perversos que acaban incrementando las matrículas y el número de alumnos.

Según planes, Minerva estará operativo en septiembre de 2015 (nótese que en el hemisferio sur del planeta esto significa empezar al curso al comenzar la primavera, como si en el norte lo empezáramos en marzo). 2013 promete ser el año en que se conocerán muchos más detalles de su planteamiento que, sin duda, serán interesantes.

Todo es distinto

Mindstorms

Tras una investigación de 3 años y 45 millones de dólares estadounidenses, desde la Fundación Gates afirman saber qué hace que un profesor sea bueno. Miraron las notas, observaron a los profesores en el aula y preguntaron a los estudiantes. Ahora los gestores educativos tendrán evidencias en las que basar su evaluación. Ésta, a su vez, es fundamental para tomar decisiones que incumben a todos los contribuyentes. Es fácil estar de acuerdo con la utilidad de la investigación.

Es fácil hasta que pensemos en la estrategia subyacente. La investigación de la Fundación Gates, de 2010, es idéntica al tipo de investigación que criticaba, en mi opinión con mucha razón, Seymour Papert en su libro Mindstorms. En 1980. Investigar el entorno del aula para mejorar el aprendizaje se parece bastante a investigar los carruajes para mejorar el transporte cuando el cambio, el automóvil, está llegando por un camino distinto. Pero esto sólo se sabe a ciencia cierta en retrospectiva, claro.

Imagine someone living in the nineteenth century who felt the need to improve methods of transportation. He was persuaded that the route to new methods started with a deep understanding of the existing problems. So he began a careful study of the differences among horse-drawn carriages. He carefully documented by the most refined methods how speed varied with the form and substance of various kinds of axles, bearings, and harnessing techniques.

In retrospect, we know that the road that led from nineteenth-century transportation was quite different. The invention of the automobile and the airplane did not come from a detailed study of how their predecessors, such as horse-drawn carriages, worked or did not work. Yet, this is the model for contemporary educational research. The standard paradigms for education research take the existing classroom or extracurricular culture as the primary object of study.

Número de personas y número de tareas independientes de un proyecto

The Mythical Man-Month, de Fred Brooks

Las últimas semanas he recomendado y enviado en PDF varias veces La Catedral y el Bazar, ensayo de Eric. S. Raymond publicado en 1997 que va de la gestión de proyectos de desarrollo de software. Un texto que no debería faltar en la lista de lecturas de nadie que quiera entender el enfoque lean startup de hoy pues es un antecedente del mismo. De paso lo he releído. Esta vez me llevó a The Mythical Man-Month, libro de ensayos en el mismo tema de Frederick Brooks publicado en 1975, cuyo capítulo del mismo título encontré en PDF.

Este capítulo explica lo que se llegó a conocer como la Ley de Brooks: añadir más personas a un proyecto de software en retraso lo retrasará más (Adding manpower to a late software project makes it later). En otras palabras, como el proceso de desarrollo es secuencial, el proyecto no se puede dividir entre un número mayor de personas que el número de subtareas independientes. Dicho con la metáfora que emplea Brooks: un embarazo dura 9 meses por más que se añadan más mujeres.

Ley de Brooks

Otro detalle del ensayo que me ha interesado es la proporción del tiempo que recomienda para las distintas fases del proyecto: un tercio para diseñar, un sexto para programar y la mitad para pruebas.

Dedicar tanto tiempo más a diseñar y probar que a programar es necesario porque, como se explica en los siguientes cuatro párrafos, estamos creando «de la nada», directamente desde nuestra cabeza, sin medio físico que ponga límites. Sólo podemos encontrar los límites escribiendo y reescribiendo los planes, experimentando con el producto, programándolo y reprogramándolo según los resultados de los experimentos.

The pervasiveness of optimism among programmers deserves more than a flip analysis. Dorothy Sayers, in her excellent book, The Mind of the Maker, divides creative activity into three stages: the idea, the implementation, and the interaction. A book, then, or a computer, or a program comes into existence first as an ideal construct, built outside time and space, but complete in the mind of the author. It is realized in time and space, by pen, ink, and paper, or by wire, silicon, and ferrite. The creation is complete when someone reads the book, uses the computer, or runs the program, thereby interacting with the mind of the maker.

This description, which Miss Sayers uses to illuminate not only human creative activity but also the Christian doctrine of the Trinity, will help us in our present task. For the human makers of things, the incompletenesses and inconsistencies of our ideas become clear only during implementation. Thus it is that writing, experimentation, «working out» are essential disciplines for the theoretician.

In many creative activities the medium of execution is intractable. Lumber splits; paints smear; electrical circuits ring. These physical limitations of the medium constrain the ideas that may be expressed, and they also create unexpected difficulties in the implementation. Implementation, then, takes time and sweat both because of the physical media and because of the inadequacies of the underlying ideas. We tend to blame the physical media for most of our implementation difficulties; for the media are not «ours» in the way the ideas are, and our pride colors our judgment.

Computer programming, however, creates with an exceedingly tractable medium. The programmer builds from pure thought-stuff: concepts and very flexible representations thereof. Because the medium is tractable, we expect few difficulties in implementation; hence our pervasive optimism. Because our ideas are faulty, we have bugs; hence our optimism is unjustified.

El mundo relatado en Little Brother, un poco más cerca

Little Brother, ilustración de Richard Wilkinson

Si han leído Little Brother de Cory Doctorow, recordarán el instituto del protagonista, Marcus: seguimiento constante vía árfidos, vigilancia permanente mediante cámaras y control continuo del uso del ordenador (el Schoolbook) a través de hardware capado y software monitorizado. Ese es el mundo que tendremos un poco más cerca con las aulas equipadas con cámaras panorámicas cuya financiación, al parecer, debatían los filántropos Mark Zuckerberg y Bill Gates por mail en 2010.

El argumento a favor de los vídeos es el desarrollo profesional de los profesores. Y es cierto que la autoobservación y la autoreflexión sirven, y mucho, para mejorar el propio desempeño. Pero sólo si la propiedad de los datos y del proceso es de la persona que quiere mejorar y desarrollarse. En este caso, a todas luces, estamos lejos de esto, en una época en que tocaría alejarse del concepto aula en lugar de convertirla en fortaleza vigilada.

Marketplaces de formación: facilitadores de un aprendizaje personalizado ampliamente accesible

Uno de los rasgos más prometedores que está adquiriendo el aprendizaje actualmente, es la posibilidad de una cada vez mayor personalización. La educación ya no necesariamente viene en un pack, con un título de lacito. Cualquiera con la intención de aprender algo, tiene cada vez más recursos para hacerlo. No se puede subrayar lo suficiente que la personalización -o individualización– del aprendizaje, para funcionar, ha de ser dirigido desde dentro, por la persona que aprende y su entorno. Es deseable que la intención venga de la persona y que ésta tenga actitud de propietario respecto a su aprendizaje.

Ahora bien, resuelto el tema de la intencionalidad, los recursos son mil. Entre los más interesantes están las plataformas de marketplace de formación que examino de forma breve y desde el punto de vista de la empresa en mi reciente post en Con tu Negocio. Lo más destacable: la propuesta de valor de estas plataformas no sólo radica en facilitar el acceso a un aprendizaje personalizado del que la pyme se puede beneficiar sino en el importante hecho de que cualquiera puede articular una propuesta formativa. Porque, como dicen en Floqq, un marketplace de formación lanzada en 2011: todos tenemos mucho que aprender y algo que enseñar.